La producción industrial de chasis y bastidores implica una serie de procesos que garantizan su integridad, durabilidad y resistencia en una amplia gama de sectores. Precisamente por su amplia variedad de aplicaciones, como en las industrias aeronáutica, naval y vial, la producción y el procesamiento deben estructurarse en función de las variables en las que se utilizarán estos chasis y bastidores.
El pretratamiento químico es una de las formas iniciales de proteger y conferir propiedades específicas a los metales, por lo que es necesario comprender cómo actúa cada proceso en este camino de mejora.
Principales procesos de preparación

Desengrasante
El primer proceso necesario antes de cualquier tipo de acabado es el desengrasado. Este proceso elimina cualquier resto de grasa, aceite, suciedad u otros contaminantes presentes en la superficie metálica. Todo este proceso se puede realizar con desengrasantes químicos que disuelven estos contaminantes, haciéndolos solubles en agua y facilitando su enjuague.
Desnudar
En algunos casos, será necesario eliminar los recubrimientos presentes en la superficie del chasis o la carrocería, como óxidos, pintura vieja o cualquier otra sustancia que impida la correcta adhesión de la pintura. Para ello, se requiere un proceso llamado decapado, que consiste en aplicar ácidos u otros agentes químicos para eliminar estos recubrimientos no deseados.
Fosfatación
El fosfatado, que se realiza después de la limpieza y el decapado, consiste en aplicar una capa de fosfato a la superficie metálica. El fosfatado ayuda a mejorar la adherencia de la pintura, creando una superficie mucho más receptiva.
Pasivación
En algunos casos, sobre todo con metales como el aluminio, será necesario pasivar la superficie, un proceso que garantiza la resistencia a la corrosión y favorece la adhesión de la pintura. La pasivación se realiza generalmente con una solución química específica diseñada para crear una capa protectora sobre la superficie del metal. Estas soluciones pueden contener ácidos como el ácido nítrico, el ácido crómico o el ácido fosfórico, entre otros.
Enjuague final
Aunque parezca un paso común, el enjuague final es uno de los más importantes en esta etapa de preparación del chasis y la carrocería. Este paso consiste en enjuagar a fondo la superficie para eliminar cualquier residuo químico que pueda quedar de procesos anteriores. Esto garantiza que la superficie esté completamente limpia antes de aplicar la pintura, garantizando un resultado final perfecto.
Cuidado en la preparación de chasis y carrocerías

A la hora de preparar chasis y carrocerías para pintar, es fundamental observar una serie de precauciones para garantizar la seguridad del operador, la eficiencia del proceso y el cumplimiento de las normativas medioambientales.
Lo primero es asegurarse de que todos usen Equipo de Protección Individual (EPP). Dado que estos procesos utilizan sustancias químicas tóxicas y altamente corrosivas, es fundamental usar guantes, gafas protectoras, respiradores y ropa protectora, además de otros equipos recomendados por los fabricantes.
También es importante seguir las instrucciones del fabricante al manipular y almacenar estos productos. Evite el contacto directo con la piel y los ojos, y manténgalos alejados de cualquier fuente de ignición.
Además, trabaje en áreas bien ventiladas para evitar inhalar vapores químicos y garantizar la dispersión adecuada de cualquier gas o vapor liberado durante los procesos de preparación.
Otra acción importante es la implementación de medidas para contener y controlar la contaminación causada por residuos químicos, como la instalación de sistemas de recuperación de solventes y la disposición adecuada de residuos peligrosos de acuerdo con las regulaciones ambientales locales.
Tome precauciones para prevenir accidentes como derrames de productos químicos, incendios o explosiones. Esto puede incluir el uso de contenedores adecuados para el almacenamiento de productos químicos, el mantenimiento regular del equipo y la capacitación del personal en procedimientos de seguridad.
Por último, realice inspecciones periódicas y mantenimiento preventivo en equipos como tanques de decapado, sistemas de ventilación y dispositivos de seguridad para garantizar que funcionen correctamente y cumplan con las normas de seguridad.
Beneficios de la preparación del chasis y la carrocería

Todos estos procesos ofrecen varias ventajas al preparar una superficie antes de pintar. La principal es la adherencia de la pintura, ya que su correcta ejecución garantiza una adhesión más eficaz y duradera, además de prevenir el descascarillado y otros defectos que podrían afectar la longevidad del metal.
Otro beneficio es la prevención de la corrosión, ya que estos procesos ayudan a eliminar los contaminantes que aceleran la corrosión en los metales. La aplicación de estos productos crea una barrera protectora contra la corrosión, aumentando la durabilidad de chasis y bastidores.
Finalmente, otro beneficio importante es que estos procesos contribuyen a un acabado más liso y uniforme, lo que hace que la pintura final sea más atractiva. Eliminar imperfecciones y aplicar los recubrimientos adecuados puede mejorar significativamente la calidad visual del vehículo.
Por lo tanto, podemos concluir que los procedimientos químicos para preparar el chasis y la carrocería antes de pintar son más que necesarios si busca una calidad superior en el acabado de su vehículo. Sin embargo, estos procesos deben realizarse con seguridad y, en caso de duda, siempre consulte a un especialista.
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